viernes, 25 de noviembre de 2016

LOS AGUJEROS NEGROS EN LA CIENCIA PATAFÍSICA


Quién me iba a decir que gracias a la patafísica sería candidato a ganar un premio Ig Nobel de física o quizá un nobel de literatura, que tampoco es moco de pavo y en estos tiempos no se sabe lo que te puede caer.
Quién me iba a decir a mí que gracias a la patafísica iba a resolver un problema que intrigaba al común de los mortales bípedos desde hace unas cuantas décadas. Y más aún sabiendo que muchos eminentes científicos han fracasado en su intento de encontrar una respuesta coherente a ese misterio.
Sí señores, me refiero a la desaparición de los calcetines en la lavadora.
Andaba yo contemplando, obnubilado, el centrifugado del útil electrodoméstico cúbico cuando caí en la cuenta que la clave estaba en la espiral patafísica.
¡¡¡Eureka!!! Grité. Un chispazo de luz había iluminado mi mente.
Sí, el rápido torbellino de agua que se genera dentro de la lavadora tiene el poder de producir pequeños desgarros en el tejido de espacio-tiempo.
Por fin, encontré el agujero, tanto tiempo buscado, por donde se colaban mis queridos calcetines desaparecidos.
Justo en ese momento, en otra dimensión paralela, otro patafísico, descubría, tan sorprendido como yo, la causa de que en su lavadora aparecieran extraños calcetines que no eran suyos.
A mí acaban de darme el Ig nobel, al patafísico de la otra dimensión le han quitado un premio igual y a mis calcetines viudos les queda al menos el consuelo de saber que su querido compañero perdido ha rehecho su vida en algún remoto universo desconocido.

¡¡¡Larga vida a los calcetines desaparecidos donde quieran que estén!!!

Fdo. Miguel Mochón de la Torre (Sátrapa Trascendente del I.P.G.)

3 comentarios:

  1. Resuelto el problema de las desapariciones calcetinarias, se nos crea una desazón. ¿Y si un día, sacando la colada del tambor lavatoril, se nos aparece un bucentauro, un piano de cola, una capibara, o una notificación de Hacienda? Que un agujero negro lo absorbe todo, incluso los buenos sentimientos. ¿Eh?

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  2. Estimado señor Cocodrilo, o quien quiera que usted sea con ese apellido o mote tan raro: Gart, sepa usted que los agujeros negros tienen como característica que todo lo absorben y nada devuelven. Por tanto es teóricamente imposible que aparezca bucentauro, piano colístico, capibara o multa de Hacienda. Por eso preocupa el caso de cierto colega apellidado Xxhjtjeg, quien encontró en la lavadora, en lugar del calcetín del pie derecho (él los distingue), unas bragas moradas de damisela, cuando este individuo vive solo y hace años que no tal. ¿Invasión?, aventuró. ¿Coladero?, intuyó. ¿Agujeros gusaniles en el espacio-tiempo?, y aquí fue el instante preciso en el que le explotó el cerebelo, poniéndolo todo como puede imaginarse. La limpiadora le hizo ascos.

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  3. Lo que dice el ínclito Arnas sobre los agujeros negros es una teoría física, que no patafísica. Dado que en este blog no se ejerce censura alguna, no borraremos la (inverosímil) parrafada. Ahora bien, pongo en conocimiento del interesado que en este acto abrimos expediente y damos traslado a la Pospólita Castigatriz. Aténgase a las consecuencias.
    PD. La ciencia patafísica dice que los agujeros negros son de mete y saca, y eso va a misa.

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